La Música No Se Ha Terminado
Ésta es la historia de Ethan Och, un jovencito que ha inspirado a su familia, maestros, amigos, compañeros de estudio, y muy especialmente, a los compañeros de la banda musical a la que pertenece. Debido a una enfermedad llamada atrofia muscular espinal que ha sufrido desde hace mucho tiempo, el cuerpo de Ethan se fue debilitando, y un día, él supo que había llegado el momento de renunciar a una de las cosas que más amaba de la escuela a la que asistía. Ethan pertenece a la banda musical de la secundaria y su responsabilidad en ella son los instrumentos de percusión. Esta banda es la que anima a los miembros de los equipos de deporte de la escuela y además participa en todos los desfiles. Él dice que cada vez que tocaba en las prácticas, se iba atrasando más y más en el ritmo, y quedaba muy atrás del resto del grupo, simplemente ya estorbaba en la ejecución de las piezas. Así que llegó el día, y reuniendo todo el valor que poseía y con una enorme desilusión, se dirigió a la oficina