Milagro de acción de gracias

Una semana antes del día de acción de gracias, mi hermana Toni dio a luz a un hermoso niño al que llamaron Bradley. Yo había planeado como regalo, comprar una biblia infantil en color blanco, con su nombre grabado en letras doradas. Pero Bradley había nacido con un defecto en el corazón que debía ser corregido lo más rápido posible. La cirugía fue programada para el día anterior a la celebración de Acción de gracias. Los doctores decían que era difícil que sobreviviera. No podíamos creerlo. Mamá y yo decidimos ir para estar con ellos. Mientras empacaba, le dije a Dios, “Dime por favor qué puedo hacer para ayudar. Danos una señal de que Bradley va a vivir”. En ese instante cruzó por mi mente que debía comprar la biblia infantil. Descarté el pensamiento, pues si mi sobrinito moría, entonces esa Biblia tan solo entristecería a mi hermana. Más tarde, en mi cuarto, escuché una voz fuerte que me dijo: “Compra la Biblia y graba su nombre”. Salí inmediatamente y compré la Biblia, tal y como l...