El Amor Todo Lo Puede
Una mujer de 26
años llamada Holly dio a luz a su primer hijo. Fue una niña a la que llamaron
Casey. A las 3 semanas los médicos le dieron el devastador diagnóstico. Lo que
empezó como un hormigueo en los dedos, hizo que terminara en terapia intensiva,
paralizada del cuello para abajo. Entonces la diagnosticaron con SGB, un raro
trastorno autoinmune que puede ser mortal. No podía respirar sola por lo que
necesitaba ayuda de las máquinas. Perdió el habla y tenía que hacer mucho
esfuerzo para que la entendieran. Sufría de un inmenso dolor. Casey, su niña,
estaba a su lado a pesar de todo. Holly luchó mucho para pasar tiempo con ella.
Holly dice que fue un momento muy oscuro, lleno de dolor, ansiedad y depresión.
Pero lentamente fue recuperando fuerzas, y su largo viaje empezó. Tras 10
semanas la sacaron de urgencias y ya podía respirar sola. Las ganas de estar
con su hija eran tan grandes, que trabajó duro con los músculos de sus brazos,
hasta que pudo cargar y darle de comer a su bebé. Ella dice que cuando vio que
había esperanza de recuperarse, eso encendió una llama dentro de ella para
luchar para estar con su bebé. Comenzó terapia física en el Hospital y cada día
mejoraba. Tras 126 días en el Hospital regresó a casa y pasó de paralizada a
poder caminar otra vez. Holly por fin pudo regresar con su bebé. Ella declara:
“Podemos dejar que el dolor nos derrote o que nos haga más fuertes”. Ella luchó
para estar con su hija y sigue compartiendo su historia para crear conciencia y
ayudar a la gente con SGB.
Hay esperanza
para todo aquel que no se da por vencido. Puede que estemos viviendo una
situación difícil, al punto de sentir dentro de nosotros mismos que no hay
salida. A todos los que sentimos esto Dios nos está diciendo, a través de esta
historia, que si hay esperanza, que no dejemos de luchar. Hay un mundo de
personas que nos necesitan a ti y a mí, y que están esperando por nosotros. Así
que anímate y continúa hacia adelante. No dejes que el dolor o la amargura
consuman tu ser. Déjate inundar por el amor de Dios, y encontrarás la salida que
tanto buscas. Nada es imposible para el que cree. Lucha. ¡Que Dios te de un
Feliz Día! Any Aular
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