La Bendición de Bella

Siempre había competido en triatlones y disfrutaba al hacerlo, pero fue uno en especial, el que cambió mi vida para siempre. Acabábamos de terminar la competencia del Triatlón del Diamante Negro,  en Washington, y estábamos esperando las premiaciones, cuando de pronto sentí que alguien lamía mis pies. Era un hermoso y juguetón Labrador Retriever negro. Entonces escuché que alguien le llamaba: "Bella, ven conmigo". Era otra triatleta, que apenada por las travesuras de la perrita, se empezó a disculpar. Le dije que no me molestaba y me presenté: - "Mi nombre es Michael"-, le dije, -"Y yo me llamo Kara", me respondió. Desde ese momento los tres nos volvimos inseparables. A medida que conocía a Kara, también conocía a Bella. Ambos nos enamoramos profundamente y planificamos nuestra boda. Cuidadosamente planeamos la forma en que Bella sería parte de la ceremonia, puesto que gracias a ella nos habíamos conocido. Pero lamentablemente, dos meses antes del día fijado, Bella enfermó y murió. Eso nos entristeció muchísimo, pero seguimos adelante con nuestros planes. Planeamos casarnos en una ciudad de Oregón, al aire libre, cerca de las montanas de Wallowa, en un pequeño rancho. En la mañana de aquel día, participamos en un triatlón, en memoria del día en que nos conocimos y para honrar a nuestra amada Bella. Allí estuvieron nuestros amigos más cercanos y familiares, algunos participaron y otros nos animaron. Al culminar la competencia, regresamos al Rancho para bañarnos y cambiarnos para la ceremonia oficial, y fue entonces cuando la vimos, una hermosa Labrador Retriever del mismo color y la misma edad que tenía nuestra Bella, saltando y jugando con nosotros. No lo podíamos creer. Su nombre era Luna y pertenecía a los dueños del rancho. Luna corrió hacia mí, tal y como lo hacía Bella, y lamió mis pies una y otra vez. Fue maravilloso. A la hora de la ceremonia, cuando Kara y yo estábamos diciendo nuestros votos, Luna se echó a mis pies, y ambos sentimos como si nuestra hermosa perrita estaba allí con nosotros, celebrando nuestra eterna unión. Fue un día memorable, pues Dios nos confirmó que bendecía nuestro matrimonio con aquella hermosa señal. Michael Gordon
Es maravilloso como Dios habla con nosotros a través de señales, y toma cuidado de los pequeños detalles para mostrarnos su amor. Todas las cosas buenas provienen de nuestro Padre que está en los cielos,  y si confiamos, Él nos guiará por la senda correcta para hacernos completos y felices. Sigamos adelante, sin desmayar. No tengamos temor, pues nuestro camino está seguro en las manos del Creador. ¡Que Dios te de un Feliz Día!   Any Aular

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